11.07.2009
¡La paz mis queridos niños!
Vengo del cielo trayendo bendiciones y las gracias de Dios. Recen para que comprendan mis pedidos. Dios los llama de nuevo a la conversión. Cambien de vida. Renuévense por amor a Dios dejando al lado todo aquello que los hace caer en el pecado.
Mujeres, obedezcan mis ruegos respecto a sus vestiduras. Una vez más les pido: vístanse dignamente. Las mujeres deben vestir como mujeres y los hombres como hombres. No usen ropas extravagantes, inmodestas, si no que ropas dignas de verdaderos hijos de Dios. No pequen con su modo de vestir. Dios les pedirá cuenta un día frente a frente, cara a cara. Cambien de vida. Acojan mis ruegos. Recen por el mundo y la paz. Sacrifíquense más por la salvación de las almas. Los amo y los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!
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