Mensaje de Nuestra Señora – María, Llena de Gracia
El Advenimiento del Mundo Nuevo – Palabras de Nuestra Señora
El tiempo del triunfo del Inmaculado Corazón de María y la Conversión en Masa
31 de julio de 2011
Queridos hijos, hoy en el día del Señor, con mucho amor y afecto Vengo a bendeciros en el Nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera paz al mundo.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a meditar en la fe, es necesario para mejorar vuestra vida, estáis en el momento de los mayores peligros en el mundo y si no tenéis fe, no vais a sobrevivir.
Jesucristo is dejó una enseñanza muy hermosa acerca de la fe, debéis escribir dentro de vuestro corazón y cultivaros, ya que será difícil para vosotros si despreciáis la Voz de Dios.
La gran guerra que viene, causará más sufrimiento, el hambre, la peste y las enfermedades graves muchas más, las reacciones de la naturaleza. Sucederán tantas cosas, porque es el fin los tiempos. La hora se acerca y se llevará a cabo la caída de los cuerpos celestes, pero el hombre no cree y descuida su fe. Es necesario valorar, escuchar el consejo de Dios, que quiere conduciros más seguro en este momento, antes de que venga el colapso de una parte del mundo.
Vosotros no habéis pensado en estas etapas tristes que tendréis que pasar, no habéis renovado vuestras vidas, ya que no estáis recurriendo Dios como debéis. Todas estas cosas van a suceder por culpa de vuestros pecados. Vosotros no sabéis la ruina que vuestros pecados atraen al mundo, si supierais aprenderíais día a día lo que el Santo Evangelio os revela, porque vosotros no sabéis cómo será vuestro futuro.
Recordad el Santo Evangelio de hoy, mientras no está pasando nada. Vosotros han visto que Jesucristo alimentó a su pueblo con hambre con cinco panes y dos peces, eran multitudes de hombres que lo seguían. Entonces veáis Mis hijos, los beneficios que trae la fe a la vida de una persona que la tiene.
Todo es fácil de resolver cuando el hombre pone su confianza en Dios, por lo que no debe permanecer indiferente. Dios quiere ayudar. Hace milagros en vuestras vidas. Sólo Dios puede hacer milagros y obra a través de sus instrumentos que son las personas y estas personas tienen fe, por esto pueden interceder ante Dios por un milagro, cuando son instrumentos de Dios. Él escoge a sus instrumentos, les da permiso para usar los dones recibidos en el momento del bautismo para el bien de ellos mismos y hacer el bien a los hermanos.
Vosotros debéis abrir vuestro corazón a Dios que diciéndole: - "Aquí tienes a tu siervo Señor, haz de mí lo que sea necesario para Vos." - Y así Dios derrama el milagro sobre vos.
Esta es el gran abandono en las Manos de Dios.
Hijitos míos, el mundo ha cerrado su corazón a Dios y ahora va a ser castigado, es necesario para reparar los errores, pero ellos no quieren reparar, sólo están tratando de desafiar.
¡Pobres niños! Ahora no sirve de nada llorar o quejarse, el castigo está a la mano. Los eventos ya se están avecinando.
El tiempo que os queda es muy poco. No sabéis bien lo que es el hambre que viene al mundo, no comer nada porque todo está contaminado por la radioactividad. Apenas podréis alimentaros de la Eucaristía, pues nada contamina el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo, este es el Alimento que os da vida. Pero muy pronto ello será suspendido cuando el Anticristo se os quite. Este tiempo está cerca. Está por venir. La Sagrada Eucaristía que vosotros estáis todavía recibiendo, Ella os alimentará en tiempo de hambre.
Entonces Mis hijos, daos prisa en pedir perdón a Dios de todo lo que habéis hecho del pecado, para que podáis recibir la Sagrada Eucaristía.
Es esto es lo que os Vengo a revelar en este día tan hermoso, tan importante, que abre más vuestro interés en la fe, crecéis a Mis hijos, crecéis sin límite, mientras haya tiempo.
Dios os está advirtiendo, porque Él no quiere que vuestra ruina. Él quiere daros la felicidad.
Continuación del mensaje del día 31 de julio 2011
Orad, orad, orad por el Santo Padre Benedicto XVI, por todo el clero, los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Orad por los ateos y paganos, no dejéis que vuestros hermanos van se queden sin sus oraciones. El tiempo es corto para todos vosotros.
Vosotros que estáis rezando, penséis en vuestros hermanos que no rezan y rezad por ellos, para que todos lleguen al cielo.
Orad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, unidos ganaréis todas las batallas, incluso si ellas son fuertes.
Por lo tanto, aumentad vuestra fe y vuestra esperanza en Dios, practicad la caridad, todo esto os fortalecerá.
Ayudéis al Santo Padre, este es un momento muy difícil para él, ya que las ovejas se dispersarán más que nunca.
Este es el momento de la persecución y el sufrimiento, vosotros comprenderéis porqué os hablo todos los días en todo el mundo.
Hablo para ayudaros advirtiéndoos, llamándoos a la oración y vosotros todavía no estáis comprendiendo por la falta de fe. Pero Dios les concederá sobre vosotros el Espíritu Santo, permanezca atento.
Os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
A vosotros brasileños, esforzaos por buscar ayuda en Dios para que no seáis sorprendidos por la oscuridad, esta es la hora más peligrosa, más grave para vosotros. Arrepentíos, arrepentíos, antes de que la mayoría de las cosas dolorosas ocurran en vuestro país y en todos los países. No tenéis cómo evitar el sufrimiento final. Todas las naciones haced lo mismo, el castigo es para todo el mundo.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Debéis reflexionar sobre el santo Evangelio de hoy: Mateo 14:13-21
No hay comentarios.:
Publicar un comentario