Nota Importante

Este es un blog estrictamente Católico. La información que aquí se publica es con fines de propagar el mensaje de Dios a través de sus siervos. Hay alguna información que no tiene que ver con los mensajes y aquí se publica para el conocimiento de todo el que visite esta fuente de información.

Amamos a Nuestro Dios Padre Todopoderoso y Eterno, a Jesucristo su Único Hijo Nacido del Padre, al Espíritu Santo dador de Todos los Dones, a la Santísima Virgen Maria, Madre de Dios y Madre Nuestra y a todos los Ángeles y Santos que habitan en el Cielo.

Es por ellos que este blog fue creado con la ayuda del Señor Jesús, Nuestra Bendita Madre Maria y la autoría del Espíritu Santo.

¡Bendecidos sean todos los habitantes en el Cielo y la Tierra!

Adoremos el Sagrado Corazón de Dios el Padre

Adoremos el Sagrado Corazón de Dios el Padre
Consagración a Nuestro Padre Celestial

Hermanos Lectores

Los mensajes traducidos son publicados en orden cronológico. Hay ciertos mensajes que son enviados con fechas anteriores y aunque no siguen la cronología son publicados debido a su urgencia. Pido disculpas si esto causara algún malestar. No tengo control del orden en que los mensajes son enviados al email para su traducción, de todas formas lo importante es su publicación para el conocimiento de todos.

domingo, 16 de febrero de 2014

Mensaje a Darly Chagas


 Mensaje de Nuestra Señora – María Llena de Gracia

El Advenimiento del Nuevo Mundo – Palabras de Nuestra Señora

El Ultimo Tiempo de Preparacion para la Purificacion de la Humanidad

  

24 de noviembre de 2013

 

Queridos hijos, con mucho amor y cariño vengo a bendeciros en el Nombre del Padre, del Hijo y del Divino Espíritu Santo.

Mis hijos, siento gran alegría en poder encontraros hoy aquí para juntos rezar delante del Padre, del Hijo y del Divino Espíritu Santo, pidiendo a Ellos la Misericordia para el mundo.

Mis hijos, hoy la Santa Iglesia conmemora la fiesta del mayor de todos los reyes que pueda existir en todo el universo, Jesucristo, El es nuestro Rey verdadero,  no existe nadie que pueda estar por encima de Su Autoridad porque El es Dios.

Pero todos sabéis que Jesucristo cuando estuvo preso e interrogado por Pilatos, él le preguntó si El era Rey, la respuesta fue que sí y también que Su Reino no era de este mundo. El dijo también que si Su Reino fuera de este mundo, Sus súbditos no lo habrían entregado a los judíos. Así quedó bien claro que ellos no Lo reconocerían, porque Lo trataron como si fuese el peor de todos los hombres.

El Reino de Dios es lo que está encima de todo lo que existe. El Reino de Verdad es este reino que nunca será destruido.

Jesucristo es el Rey de todo el universo, quiera creerlo el hombre o no, El es el Salvador del mundo. Pero, la mayor parte de la humanidad Lo desprecia, no tiene temor a El, no Lo quiere conocer.

Todas las criaturas tienen que someterse a El. El es el Rey por encima de todo, Su Poder está sobre todo el universo.

Por lo tanto, ahora el mundo va a conocer Su Poder, el mundo va a doblar la rodilla delante del verdadero Rey. Muy pronto El se manifestará con Su Segunda Venida al mundo. Vos sabéis que está próximo, el Cielo entero está preparando a la humanidad para el descenso del Rey sobre la tierra.

Alegraos toda la humanidad porque está próximo el descenso del Reino de Dios. Todo lo que está podrido será quemado, la tierra entera necesita lavarse antes del día en que el Rey del Universo estará presente visiblemente para juzgar a vivos y muertos.

 Vivos son los que aman a Dios por encima de todas las cosas y a su prójimo, y muertos son los que merecen el Infierno.

Cada persona va a analizar su vida, conocer si el alma está limpia del pecado para entregarla a Dios. Será el día en que el pecado será eliminado de la faz de la tierra.

Veáis Mis hijos, vos estáis todavía en el mundo donde Dios quiere que todos despierten y reaccionen en contra del error, que todos se conviertan. Y hoy estáis recibiendo avisos del Cielo y vos escondiéndoos para continuar pecando, pero Dios ve todo, no hay cómo esconderse de El. Todos tendrán que rendir cuentas de sus errores y enderezarse para recibir al Rey.

Yo estoy aquí para ayudaros, no quiero dejar a nadie atrás. Hagamos juntos nuestras oraciones, el enemigo no puede ganar esta batalla. Tenemos a Dios con nosotros, pero necesitamos usar los dones que El nos dio para atraer más almas para el Cielo. Limpiéis vuestros corazones rezando siempre el rosario todos los días vos conseguiréis vencer.

Renunciad al pecado cada día más, valorad los Sacramentos, obedeced los Mandamientos de Dios y de la Santa Iglesia, confesad y dejéis que Jesucristo cuide de vos. El es el Alimento que vuestras almas necesitan para llegar al Padre.

Su Sangre es verdadera Bebida y Su Carne es verdadero Alimento para que todos tengáis Vida Eterna.

Comed y bebed todos para vivir eternamente.

Quien se alimente de Dios nunca pasará hambre.

Preparaos, el Reino de Dios es para todos, vamos a combatir lo que hace al hombre perder el derecho de vivir en el Reino de El, el pecado.

Jesucristo es nuestro Rey, pero es necesario vencer al pecado para entrar en este Reino. Jesucristo reina en los corazones y en todo, pero El no obliga al hombre a querer vivir en Su Reino, el hombre es quien tiene que decidir porque todos son libres para decidir. Por esto descendí al mundo para rezar con vosotros, a ayudaros en busca de fuerza en Dios para que cada uno decida por Dios.

La felicidad que vos conocéis no se compara con la Felicidad que Dios os quiere dar. El os ofrece Vida Eternamente.  

La felicidad del mundo es pasajera, dura horas, pero la del Cielo dura por toda la eternidad. Todo lo que Dios os da es para siempre, pero con el pecado vos estáis siendo perdedores. Despertad y venced.

Vos seréis ricos verdaderamente cuando no piséis más en la Felicidad. Cuando el hombre peca, él está pisando en ella, está despreciando el derecho a la Salvación. La Salvación significa libre de pecado, ningún apego, ni recordar nuevamente el tiempo en que el corazón fue pecador, todo será apagado después que el hombre se convierta y entre en el Reino de Dios. Vos seréis ricos, no de esta riqueza que conocéis, seréis verdaderamente ricos, cuando entréis en el Reino de Dios.

Nada os faltará, nunca más ofenderéis a Dios.

No existirá más tristeza, ni enfermedades, ni hambre, ni diferencias, ni desesperos, ni fracasos, ni catástrofes, ni tragedias, ni ingratitudes, ni aflicciones, y principalmente ni discordias ni guerras.

Todo esto ya habrá pasado, todo lo que no agrada a Dios.

Así comenzará la Nueva Jerusalén, la Iglesia de Dios, el pueblo lleno de sabiduría, de paz y de alegría eterna.

Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a meditar sobre el Paraíso y todo lo que os hablé fue para vos decidir si queréis entrar en El o entrar en la peor morada que es el Infierno.

El Paraíso es el Reino de Dios, allá existe sólo felicidad.

Preparaos para recibir esta Herencia que Dios tiene para daros. Todos los que se convierten la recibirán.

Mis hijos, preparaos ahora para la Santa Navidad con el corazón abierto, lleno de esperanza y confianza en la Misericordia de Dios. El mundo está todavía dividido porque una parte menor cree y la otra, que es la mayor, no ha decidido todavía si cree o no en Dios. Esto se llama desprecio, indiferencia y ellas van a causar una gran tristeza al mundo. Estos no tendrán fuerza para comprender los momentos difíciles que se están aproximando.

Pero, es bueno que todos conmemoren la Navidad para que la Gracia de este día se extienda al mundo entero dejándoos preparados para vivir el tiempo de las mayores catástrofes en el mundo entero.

Dios quiere a todos de manos dadas viviendo la mayor fraternidad, ayudándose unos a otros. Pido a Dios que esta Navidad Mis hijos reconozcan que no es una fiesta sólo de dar regalos, sino que mucho más que esto, es una fiesta de agradecimiento a Jesucristo que se hizo hombre y nació en medio de vos, para liberaros de la muerte eterna que es ser condenado al Infierno. Espero que todos Mis hijos sepan pedir a Dios el perdón de sus pecados para que El reconstruya en ellos una nueva vida. Que se acaben las diferencias, todos sean felices para siempre. Es hora de prepararse para este gran cambio en vuestras vidas.

           Vos no sabéis cuál será la última Navidad, pero debéis aceptar la Voluntad de Dios sin rebelión, suceda lo que suceda Dios os invitó a prepararse, pero vos dejasteis para prepararos sólo después, cuando veáis con los ojos de la carne y pudierais tener certeza que era verdad.

Mis hijos, aumentéis vuestra fe cada día más y convertiros.

Es esto lo que vengo a revelaros hoy para vuestra conversión.

Rezad, rezad, rezad por los dos Santos Padres los Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas y por toda la humanidad.

Rezad por los ateos y paganos, pidiendo a Dios que os de más fuerza para ayudar con oraciones a todos ellos.

Aumentéis vuestra fe y esperanza para no desanimaros. Así Dios os dará la alegría de saber que luchasteis por vuestros hermanos. Mostrad a El que sois capaces de amar a vuestros hermanos y no dejarlos atrás.

Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, haced todo lo que fuera posible para vuestra Salvación.

Todos los que se están convirtiendo tiene el deber de ayudar a buscar a los que todavía no han regresado a Dios, que regresen con urgencia. Faltan muchos y vos no tenéis la noción de cuántos son. Pero, Dios sabe y El quiere que vos os améis unos a otros porque la hora es muy grave.

La verdad será conocida por todos vosotros.

Esta es la última generación que está sobre la tierra.

Dentro de poco tiempo toda la humanidad estará delante del Divino Juez. Sea para recibir la Salvación o la condenación.

Ayudéis a los Santos Padres los Papas a buscar a los que todavía no se han despertado y necesitan despertar y buscar Refugio dentro de la Iglesia.

El Refugio es Mi Inmaculado Corazón. Cuidéis de vuestras almas. Es hora de mostrar a Dios que estáis arrepentidos de vuestros pecados y queréis el perdón de El. Mostradle a El que sois capaces de amarse unos a otros.

Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.

Brasileños, brasileños, atención, permaneced en estado de gracia, pedid a Dios fuerza para ayudarse unos a otros en este tiempo de grandes aflicciones en vuestro país.

Todas las naciones, haced lo mismo, las pruebas son para todos vosotros. Confiad en la Misericordia de Dios.

Ahora os ofrezco Mi Inmaculado Corazón como Refugio en esta hora tan dolorosa para todas las naciones.

Os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo el Salvador del mundo,

María, la Inmaculada Concepción. 

 

No hay comentarios.: