Mensaje de Nuestra Señora – María Llena de Gracia
El Advenimiento
del Nuevo Mundo – Palabras de Nuestra Señora
El Ultimo Tiempo
de Preparación para la Purificación de la Humanidad
2 de febrero de 2014 – Presentación
del Niñito Jesús en el Templo de Dios
Queridos hijos,
con mucho amor y cariño vengo a bendeciros en el Nombre del Padre, del Hijo y
del Divino Espíritu Santo.
Unidos a la
Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, vamos
llegando al final de un tiempo de gran importancia para la humanidad, porque
fue el tiempo que Dios por último llamó al mundo a despertar del sueño profundo
que vivía, por no dar importancia a las comunicaciones del Cielo.
Lo que El quiere
es que todos los hijos vivían en armonía con el Cielo.
Ya se está
acercando el tiempo en que habrá gran transformación de la humanidad. Todos los
hijos que siguen las Enseñanzas contenidas en la Sagrada Escritura, toman
conocimiento de que un día llegara la hora del Juicio Divino en la tierra para
todos los hombres.
El despertar a
la realidad es de gran importancia, porque las cosas materiales son pasajeras
en un día muy próximo tendréis que desapegaros de ellas. Vos tendréis que
decidir entre el Cielo y el Infierno, pues quien nos e convierta va para el
Infierno, no existe otra dirección, son solamente estas dos, porque quien va al
Purgatorio esta fuera de peligro de caer en el Infierno. Entonces, debéis
pensar mucho sobre vuestra salvación, si queréis la Felicidad Eterna.
Vos sabéis que
el Juicio Final y el Individual, que viene primero, es para todos, por estos debéis
vos prepararos todos los días de vuestra vida, reparando vuestros pecados,
pedir perdón a Dios de todo lo que hicisteis y haces de errado en este tiempo
de peregrinación en la tierra. Nadie debe dejar para la última hora. Nadie
puede huir de este suceso y él ya está muy próximo.
El mundo hasta
ahora sólo ha despreciado la vida que recibió de Dios, el mundo vive queriendo
medir fuerza con Dios, no se humilla, no practica la caridad como debía
practicar, no cultivéis la fe, por esto no está listo para el Juicio. La
balanza está puesta, lista para pesar vuestras obras de caridad, de
misericordia, de obediencia a Dios.
Deseamos que
vos tengáis buenos resultados en la hora del acierto con Dios.
El hombre dudó,
relajó con su vida, ahora corre peligro muy grande.
Toda la tierra
está impura necesitando ser purificada porque desde la llegada de Jesucristo al
mundo, el nombre está en una indiferencia muy grande con lo que El enseño a
través del Santo Evangelio que El os dio para que cada un aprendiese la
fidelidad, la obediencia a Dios.
El hombre está
despreciando la Sagrada Escritura, criticando todo como si fuese el mayor
conocedor del futuro. Viene llegando la hora de cada uno presentarse delante de
Dios para saber para donde va después que parta de este mundo dominado por el
pecado. La
desobediencia es vuestra preferencia.
No adelanta la
humanidad rebelarse contra los Planes de Dios, El no está debajo de nadie, El
está encima de todas las cosas, los Planes de El permanecen por toda la
eternidad, El sabe lo que hace y no erra en ninguna hora.
No es Dios
quien tiene que pedirle a la humanidad permiso para hacer alguna cosa, ni para
transformar al hombre. Pero sí la humanidad tiene que pedir a Dios para
socorrerla, transformarla, darle a ella una nueva vida.
Entonces, la mejora comienza con vuestro pedido de
perdón de vuestros pecados.
Ahora El está
avisando, la hora de la gran Misericordia está llegando. Dios puede hacer todo
solo, El no necesita de nadie, pero vos necesitáis de la ayuda de El y de
vuestros hermanos, debéis vivir cada dia como si fuese el ultimo, con atención
para no empeorar vuestra situación.
Debéis obedecer
a los Mandamientos, seáis fieles a Dios.
Dios puede
hacer todo solo porque está por encima de todo, el Poder de El es lo mayor que
existe, pero El quiere que todos participen con buena voluntad convirtiéndose
para recibir la gracia de la Salvación. El hombre tiene que bajar la cabeza, arrodillarse
y pedir a Dios el perdón. Por lo tanto, todos están recibiendo avisos,
enderezaos, dejéis solamente a Dios tomar cuenta de vuestras vidas.
Entrad en el
Camino del Cielo, el Camino es solamente uno, Jesucristo.
El quiere que
todos vengan hasta El para llegar al Cielo.
Mis hijos, la
Santa Palabra de Dios os revela hoy sobre la presentación del Niño Jesús el
Señor.
Pasado un
tiempo, José y Yo fuimos a Jerusalén para la purificación Mía y de Jesucristo,
conforme a la ley de Moisés. Así sucedió, cumplimos la Voluntad de Dios
llevando al Niñito para ser consagrado como toda criatura primogénita del sexo
masculino debía ser consagrada al Señor. Ofrecimos el sacrificio también. Allí
vino Simeón y, admirado por reconocer a Jesús como siendo El el Mesías
Prometido, hizo sus aclamaciones como oísteis hoy.
Mis hijos, veáis
cómo es obedecer a Dios, haciendo la Voluntad de El que veréis la realización
de todo lo que El promete. El Padre siempre quiere que los hijos hagan las
cosas siguiendo las Enseñanzas de El, vos comprenderéis todos lo que El os
habla y os promete, siendo obedientes.
Dios quiere la
obediencia y por eso cumplimos todo lo que El quería de nosotros, fuimos al
templo como El ordeno a todos, hacemos parte de este todo, tanto Jesucristo
como Yo, como vos, somos hijos de Dios Padre, aunque Jesucristo sea Dios, pero
El en Su naturaleza humana también necesitaba hacer la Voluntad de Dios Padre.
El vino al mundo como Hijo para cumplir lo que Dios Padre quería que El
hiciese, Salvar al mundo. El nunca peco Yo tampoco, pero no dejamos de seguir
las costumbres que todos los hijos tienen que seguir, ir al templo de Dios,
seguir todo conforme es la voluntad del Padre.
Así Jesucristo
fue creciendo dando ejemplo, del cual todos deberían hacer lo mismo, obedecer
al Padre. Así el Divino Espíritu Santo os ilumina mostrándoos todo lo que
necesitáis hacer para vencer los peligros que os amenazan día y noche, hasta
que Jesucristo venga nuevamente al mundo para poner fin en todos vuestros
sufrimientos.
El Padre, que
mucho os ama, quiere que escuchéis los Avisos del Cielo para comprender que vos
no estáis abandonados, enderecéis vuestros pasos, vuestra vida. Un día vos
también seréis tomados por sorpresa y veréis como Simeón que estáis delante de
Dios. Si hoy no estáis todavía acostumbrados a doblar vuestras rodillas delante
de Dios invisible, doblareis cuando El esté visible, pero más felices son los
que ya las doblaron por fe, así ya estáis recibiendo más las gracias de Dios.
El secreto para vencer vuestras dificultades
está en el momento que sois capaces de rezar, de arrodillarse y hablar con Dios
con toda confianza que todo ser humano puede tener, basta abandonar de una vez
y por todas la duda, es necesario tener fe verdadera. Creáis Mis hijos, con toda fuerza de
vuestros corazones, así Dios todos los días os fortalecerá en la fe.
Acoged las
Enseñanzas de El antes que El derrame sobre el mundo la orden a los Angeles que
están con las tazas desbordándose, para la limpieza total de toda suciedad de
la que vuestros corazones están llenos.
Está llegando
el gran sufrimiento para el mundo entero, todos los países, el mar también,
pasaran por muchas horas muy dolorosas.
El mar no será
solamente un mar de aguas, sino que de sangre.
Estos todos lo
verán, no adelante la humanidad querer pisar los Avisos del Cielo, es hora de
eliminar la maldad que creció en el corazón del hombre y Dios mostrará a todos
los que no quieren creer, que los Planes de El permanecen de generación en
generación.
Es esto lo que
vengo a revelaros hoy para vuestra conversión.
Rezad, rezad,
rezad por los dos Santos Padres los Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo
el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los
ateos y paganos, ellos necesitan de mucha ayuda para cultivar la fe que Dios
plantó en todos los corazones, pero ellos prefirieron desafiar a Dios y hoy
corren el riesgo de no conseguir salir de la oscuridad.
Donde no hay
esperanza no hay tampoco coraje, la fuerza, peor, no hay luz.
Es necesario
que ellos salgan del desprecio, del orgullo para la claridad. Vamos todos los
cristianos a extender nuestras manos para ellos, vamos a rezar más y traerlos a
la realidad que es Dios. No podemos dejar ni un pecador en la oscuridad. Dios
está dándonos su Luz para que la demos también los que están muy distantes.
Vamos hijos, vamos a buscar a vuestros hermanos.
Rezad, rezad
por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo. Vos estáis escuchando claramente
las acusaciones sobre los cristianos, especialmente sobre los Santos Padres los
Papas. Debéis meditar sobre los ataques del mal que quiere acabar con la Santa
Iglesia y concientizar que cada persona comete sus errores, los Santos Padres
los Papas no son culpados por los errores de los cristianos, pero sabiendo que
en el Vaticano también tiene falsos cristianos, pero es necesario que el mundo
comprenda que solamente Dios ve todo.
Ningún pecador
queda oculto a los ojos de Dios, pero a los ojos de los Santos Padres los Papas
ellos quedan, no adelanta culpar a los Santos Padres los Papas por los errores
que otros cometen. Quien se levante contra los santos Padres los Papas son
personas que nada aprendieron sobre acusar sin tener certeza. Esto no es bueno
para nadie. Todos debéis dar las manos para mejorar lo que está errado y no
hacer que la cosa quede peor.
Los Santos
Padres los Papas están siempre bajo la protección de Dios, quien atente contra
ellos, está provocando lo peor para sí mismo, está irritando la Ira de Dios. Ningún Papa deja de ser siervo para
ser un dios. En la tierra la
humanidad quiere saber más que Dios, quiere mandar hasta en los Papas que son
elegidos por la fuerza del Espíritu Santo.
Meditéis Mis
hijos, el odio está destruyéndoos. Ayudéis a los Santos Padres los Papas con
oraciones en vez de estar lanzando espadas en ellos, meditéis que ellas pueden
llegar a ellos y regresar con más fuerza sobre vosotros mismos. Así corréis el
riesgo de ser heridos en el alma.
Yo os amo mucho
y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasileños,
viene llegando vuestra hora, especialmente por culpa de la fiesta que no
respeta la Voluntad de Dios, el carnaval.
Todos rezad,
rezad porque no será bueno lo que viene ahora.
Todas las
naciones, haced siempre lo mismo, rezad, rezad.
Muchas
sorpresas están para suceder en el mundo.
Aumentéis
vuestra fe y vuestra esperanza en Dios.
Ahora os
bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre
de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada
Concepción.
Debéis meditar
en el Santo Evangelio de hoy: Lc. 2: 22 – 40 ó 22 – 33.
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