Retrato pintado de la imagen de Nuestra Señora según Ella se le apareciera al Hermano Eduardo.
MENSAJE DE NUESTRA SEÑORA
(10/11/2009) São José dos Pinhais/PR, Brasil
Queridos hijos, Yo siempre estaré aquí de brazos abiertos para recibirlos. Yo soy la Rosa Mística – Mediadora de Todas las Gracias. Soy la Madre de Amor.
Vengo del Cielo para estar más cerca de vos. Me alegra Mucho cuando veo a un hijo regresando al camino de la salvación. Amados hijos, no temas a las críticas. Deseo que tengan confianza en Mi intercesión.
¡Los amo! Recen el rosario todos los días y no desperdicien estas gracias.
Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
MENSAJE DE NUESTRA SEÑORA
(08/11/2009) São José dos Pinhais/PR, Brasil
Invitación para los Cenáculos
Queridos hijos, Soy la Reina y Mediadora de Todas las Gracias.
Soy la Madre de Jesús y también vuestra Madre.
Hijitos, una vez más le pido que acepten de corazón los mensajes que la Santísima Trinidad les envía a través de Mi.
Amados hijos, no se desanimen en divulgar estos Mis mensajes.
Hijos Míos, no desperdicien las gracias que les traigo en estas Mis manifestaciones aquí en São José dos Pinhais. Recen por los sacerdotes y por las vocaciones religiosas.
Amados hijos, pidan al Espíritu Santo primero que todo.
Amado hijo, tu presencia en los cenáculos realizados en las ciudades donde visitas, Me trane mucha alegría; porque el Cielo se abre aquí para juntos alabar al Creador. ¡No desperdicien esta gracia!
Eduardo Mi hijo, estaré contigo en todos los cenáculos realizados en las ciudades donde visites. Sean fieles a Mis pedidos.
Los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén, amén, amén.
MENSAJE DE NUESTRO SEÑOR
(08/11/2009) São José dos Pinhais/PR, Brasil
Mi pequeño lirio, ¡tienes Mi bendición!
Eduardo Mi hijo, no tengas miedo de anunciar Nuestros mensajes por donde vayas. Cada vez que viajes en misión para hablar de Nuestros Sagrados Corazones (en los cenáculos) Yo el Señor manifestaré Mi amor por vos.
Le hablo a Mis sacerdotes: Salgan de vuestros escondites (iglesias) y vayan a procurar por Mis ovejitas que andan perdidas y que están siendo presas fáciles del maligno.
Amados sacerdotes, no dividan más Mi iglesia. ¡Únanse!
Mis sacerdotes, comiencen a preocuparse con los intereses y las cosas del cielo y no con las cosas de este mundo.
Oren unos por los otros. Busquen y prediquen la reconciliación.
Les dejo Mi paz.
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