Mensajes de Nuestra Señora – María, Llena de Gracia
El Adviento del nuevo mundo - Palabras de Nuestra
Señora
El último tiempo de mensajes para la humanidad
25 de febrero de 2018
2do domingo de la Santa Cuaresma - La Transfiguración del Señor
2do domingo de la Santa Cuaresma - La Transfiguración del Señor
Queridos hijos, hoy, en el día del Señor, con mucho amor y cariño, vengo a bendeciros en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, Me alegro de poder todavía estar con vosotros para transmitir al mundo la Santa Palabra de Dios, pues el mundo ahora necesita apresurarse en escuchar los Consejos de Él.
Vosotros estáis en el último tiempo de cuidar mejor de vuestras almas, para entregarlas a Aquel que todo puede hacer para salvaros.
Entonces, meditad que este es el tiempo final, para que el hombre enderece su vida y entregándola a Dios.
Entonces, si los hijos desean la Vida Eterna, deben procurar vivir la Voluntad de Él.
Dios no deja al mundo quedarse sin su ayuda, Él está siempre presente, enseñando a todos y conduciendo a todos los que merecen la Salvación. El merecimiento es para quien se convierte. Quien no se convierta no irá al Cielo. El tiempo es convertirse antes de la hora de la muerte.
Como nadie sabe cuál es la hora que va a pasar por la muerte del cuerpo, hay que convertirse lo más rápido posible. No dejar para después, cuidar del alma todos los días.
Pero los hijos por no tener firmeza en la fe, se desvían por el camino del error, las cosas que más los atraen son las impurezas, las desobediencias a los mandamientos.
El pecado es el peligro del merecimiento del Infierno.
Por eso cada vez que el hombre peca, está fuera del Camino del Cielo. Jesucristo es el Camino del Cielo y el pecado es el camino del Infierno.
Cuando el hombre se arrepiente verdaderamente de lo que hace, regresa al Camino del Cielo.
Pero hay que perseverar en la obediencia a Dios y esto no es fácil, porque el hombre es débil, pierde la fe fácilmente.
El peligro es el hombre pecar deliberadamente.
Dios ha dado al mundo los mandamientos, el hombre se envicia y le gusta más el pecado, no se arrepiente verdaderamente de haber pecado y repite constantemente.
El hombre abusa de la Bondad de Dios, piensa que Dios perdona fácilmente todo y entonces los hijos piensan que pueden pecar tantas veces como quieran, pero no es así.
El día del Juicio Final está cerca para todos y sólo en aquel día es que el pecador va a concientizar que el pedido falso de perdón no vale nada.
Allí, ante Dios, frente a frente, viéndolo como Él es, Su Justicia no tiene errores, Ella es la única verdadera, el hombre temblará porque se burló de Sus Enseñanzas.
Entonces, mis hijos, sed fieles, puros y verdaderos, debéis labrar vuestros corazones como si se labran las piedras preciosas, principalmente el oro. Observad cómo el oro brilla, como brilla también los diamantes, así que esforzaos porque vuestra alma puede brillar más que todo esto y sólo depende de vuestra conversión.
Echéis fuera toda desobediencia a Dios, no sabéis a qué hora seréis llamados a la presencia de Dios.
Mis hijos, convertíos, convertíos, cada día el mundo camina hacia el Tribunal Divino, todos tendrán que pasar por allí. Vosotros no sabéis qué día y hora seréis llamados.
No hay medio de fuga de la hora del Juicio Final.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a reflexionar sobre el hombre temeroso a Él, y sobre todo el momento en que Jesucristo pasó por la Transfiguración gloriosa, delante de Sus discípulos, los que estaban con él en lo alto del Monte Tabor. Allí estaban presentes también Elías y Moisés, y los discípulos Pedro, Jacobo y Juan.
Jesucristo repentinamente resplandeció y así se quedaron
Continuación del mensaje del 25 de febrero de 2018
admirados y Dios Padre se manifestó con su voz diciéndoles: "Este es mi Hijo amado, escuchadlo."
Hoy Mis hijos, Dios Padre repite esto delante de vuestra
conciencia todos los días: - Escuchad a Jesucristo, sólo Él puede salvaros. Él es el Salvador del mundo.
Dios también hoy os habla de la obediencia, echad fuera toda desobediencia a Dios, sed puros de corazón.
Dios también hoy os habla de la obediencia, echad fuera toda desobediencia a Dios, sed puros de corazón.
No podéis huir del Juicio Final, él está muy cerca, preparaos para aquel día. Puede ser en cualquier momento. Todos los días mueren muchos hijos.
Convertíos, convertíos, todos los días preparaos.
A veces Miro a vosotros que Me has escuchado y has venido a oír el mensaje del Cielo, son tantos los que no perseveran en el cambio de vida, no tienen firmeza de fe, se alejan y se burlan de lo que transmito al mundo.
Pobres hijos, el hombre humilde escucha y agradece a Dios pues Él envió ayuda, porque Él conoce la debilidad de cada uno. Pero un día todos los que se fueron alejando volverán y pedirán el perdón a Dios, pues comprenderán que se equivocaron.
Pero perdieron tantas Enseñanzas y tendrán que esforzarse
para no sufrir como van a sufrir a los que se burlaron de Mí. Sufrirán
porque sentirán en el corazón que se perjudicaron a sí mismos.
Esto es lo que vengo a revelaros hoy para vuestra conversión.
Rezad, rezad, rezad por los dos Santos Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y los paganos, sed fieles en el amor a vuestros hermanos. Abandono es pecado, no dejéis de hacer el bien a vuestros hermanos, rezad por ellos, sólo Dios puede juzgar el acto de cada criatura. Vosotros no sabéis cómo es importante luchar por la Salvación de los que todavía están descuidando de sus almas. Dios os dará la recompensa en el Cielo.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, todos de la mano en este momento para superar los sufrimientos.
El mundo está provocando la ira de Dios y tendrá respuesta.
Ayudad a los Santos Papas a buscar a los que están en la indiferencia.
Cuántas ovejas están en peligro, porque están lejos de la obediencia a Dios. Vamos a ayudar a los Santos Papas a rescatarlas.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasileños, rezad cada día más, muchos sufrimientos están llegando y vosotros no tenéis fuerza para superar.
Rezad, rezad cada momento que podéis.
Todas las naciones, nuevas amenazas asustarán al mundo. Cada día más peligro, la guerra está sucediendo y muchos no entienden. Es necesario cuidar del alma.
El mundo perdió el respeto a Dios, casi totalmente.
Rezad, rezad, sin oración no tendréis fuerza.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Debéis reflexionar sobre el Santo Evangelio de hoy: Marcos 9,2-10 1ª lectura: Génesis 22,1-2.9ª.10-13.15-18 - 2ª lectura: Romanos 8,31b-34
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El Adviento del nuevo mundo - Palabras de Nuestra
Señora
El último tiempo de mensajes para la humanidad
21 de febrero de 2018 - Primera semana de la Santa Cuaresma (miércoles)
Queridos hijos, con mucho amor y cariño, vengo a
bendeciros en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, Mis pequeños hijos, vosotros estáis llamados a la oración con más intensidad en este momento, porque algo terrible está para ser revelado en vuestra patria.
Desde el principio de Mis venidas al mundo, para anunciaros los acontecimientos que os estarían impactando, no habéis llevado en serio el Llamado que Dios Padre Me envió para alertaros.
Rezad Mis hijos, muchos hijos partieron por mal camino y procuraron causar más dificultades que vosotros ya estáis sufriendo. Entonces os advierto, rezad durante el día y durante la noche si están despiertos, porque cualquier cosa de terrible acontecerá en vuestro país.
Mis hijos, habéis entrado en un tiempo de gran sufrimiento.
Tanto tiempo os he revelado y vosotros os quedasteis acomodados. Ahora buscasteis un tiempo más doloroso, con vuestros pecados.
Como ya os he revelado hace tanto tiempo, preparaos, siempre tendréis sufrimientos hasta que Jesucristo venga para juzgar vuestros pecados. Vosotros veréis el cielo oscurecerse, anunciando que algo de terrible está para llegar.
Rezad Mis hijos, colocad las velas visibles porque será un pasaje en que muchos hijos quisieran que no sucedieran tantos sufrimientos.
Rezad, rezad, rezad mucho en esta Cuaresma, cada año que pasa más difícil quedará vuestra purificación.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a reflexionar sobre los peligros que sucederán muy pronto.
Vosotros habéis oído cuántos días Dios mandó a Sus profetas anunciar los acontecimientos que llegarían a muchos lugares. Pero hoy está más difícil, por eso Dios Me envió a estar con vosotros y rezar juntos.
Nada puede cambiar la hora de vuestra purificación.
En todos los tiempos las personas fueron advertidas y aún así el desprecio no faltó en el mundo.
Mis hijos, vosotros despreciasteis la ayuda del Cielo y ahora tendréis que enfrentar muchas dificultades.
Vamos a prepararnos porque muchos hijos están presos en las cárceles y pueden ser muertos sin poder defenderse.
Esto es lo que vengo a revelar hoy para vuestra conversión.
Rezad, rezad, rezad por los dos Santos Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y los paganos, recordad que Dios os ha dado fuerza y coraje para rescatar a vuestros hermanos. Muchos rezan y otros todavía no han querido luchar por ellos. Quien hace lo que Dios manda recibe bendición especial. No basta pensar que no tenéis que luchar por vuestros hermanos, esto es amor y obediencia a Dios.
Si vosotros pisáis en la Gracia que Dios os da, nada recibiréis. Pero si queréis el bien de vuestros hermanos, recibiréis de Dios Gracias para vuestra Salvación.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, veréis ahora aumentar la persecución sobre Ella porque los falsos pastores quieren ser elevados, usando la fuerza contra todo lo que Jesucristo sembró en el mundo. Vosotros ya estáis viendo la matanza de los inocentes, la matanza de los jóvenes pecadores y veréis la persecución a los sacerdotes y de los hijos que ayudan en la Santa Iglesia. Pero quien vence es Jesucristo, Él es el vencedor de la muerte y ay de aquellos que se levantan contra El.
Continuación del mensaje del día 21 de febrero de 2018 - Santa Cuaresma
(miércoles)
Los hijos están ahora siendo perseguidos por el poder del demonio, pero el demonio no es el vencedor de la muerte. El vencedor de la muerte es sólo Jesucristo.
Los hijos están ahora siendo perseguidos por el poder del demonio, pero el demonio no es el vencedor de la muerte. El vencedor de la muerte es sólo Jesucristo.
Delante de El toda rodilla se doblará y así los enemigos serán derrotados.
Ayudad a los Santos Papas a buscar las ovejas que están distantes. La hora se acerca y ellos necesitan volver antes de que vengan las dificultades de ahora.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasileños, rosario en las manos, muchas oraciones son hechas, pero vosotros necesitáis más y más.
Reservad alimentos y agua pura. La epidemia va a avanzar más. Rezad, rezad, rezad.
Todas las naciones, vosotros veréis a Brasil y comprenderéis porqué descendí del Cielo tantas y tantas veces para traer mensajes de alerta para él. Pero vosotros también tendréis mucho que prepararos.
La guerra ya ha comenzado y vosotros no habéis percibido.
Prestéis atención ahora y recéis también.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Debéis reflexionar sobre el Santo Evangelio de hoy: Lucas 11,29-32 - Lectura: Jonás 3,1-10.
Mensajes de Nuestra Señora – María, Llena de Gracia
El Adviento del nuevo mundo - Palabras de Nuestra
Señora
El último tiempo de mensajes para la humanidad
19 de febrero de 2018
1ª semana - tiempo de la Santa Cuaresma
1ª semana - tiempo de la Santa Cuaresma
En esta hermosa mañana, el Señor viene a alimentaros con Su Santa Palabra, para que tengáis Vida eternamente.
La Palabra de Dios es Salvación y todos los hijos pecadores necesitan oírla con el corazón abierto, para convertirse.
Por lo tanto, en todos los tiempos Ella está sobre el mundo para que toda la humanidad se convierta. Dios quiere que todos se conviertan para que todos los tiempos sean de paz, de amor y de justicia verdadera.
Entonces, durante este tiempo de la Cuaresma debéis meditar y tomar la decisión correcta, la conversión.
Mis hijos, reviviendo ahora el sufrimiento de Jesucristo mientras estaba en el desierto, procurad mejorar vuestro corazón.
Mis hijos, es grande Mi alegría en poder aún estar con vosotros, trayendo al mundo el mensaje de Dios. Este es el tiempo que Él ha marcado para la preparación de los que desean la Salvación. Es necesario que el hombre se convierta y renuncie definitivamente al pecado.
El tiempo está pasando y muchos todavía no han decidido por la conversión. Dios llama a todos los hijos, pero no todos acogen Su Llamado, no valoran Su Palabra. La mayoría está indiferente, no se preocupa por el alma.
Dios no obliga a nadie a nada, pero Él ofrece todos los medios de entendimiento, para que los hijos se corrijan y vuelvan a Él.
Los que quieren la Felicidad eterna se humillan para escuchar los Consejos que Él da todos los días. Estos enderezan los pasos antes del paso por la muerte.
Nadie sabe la duración del tiempo en la tierra, pero aprended a valorar cada día, como si fuera el último día en la tierra.
En verdad cada día es para ser bien vivido, pero no todos lo valoran, la mayor parte no evita el pecado. Para la mayor parte, el día es para pecar cada vez más.
El hombre quiere hacer valer sus deseos y él siempre está deseando el placer de la carne, la riqueza, la comodidad material y poseer todo lo que él cree más agradable a la carne.
Pero esto está mal, la felicidad no está en las cosas materiales, ella está en el amor, en la aceptación, en la renuncia a las cosas perjudiciales, ella está en la caridad.
El hombre se siente feliz cuando ayuda a alguien, pero la mayor parte se siente feliz cuando se arrepiente de sus errores.
Entonces Mis hijos, mirad y ved que lo más importante es cuando el hombre se humilla y reconoce que ha practicado cosas que no agradan a Dios, y entonces él pide el perdón y se corrige.
El mundo necesita valorar la Luz de Dios sobre él, comprender los designios de Él sobre cada persona y tener la aceptación.
El Divino Espíritu Santo os ilumina a la hora del Bautismo para vuestro crecimiento espiritual. Él une a Sus hijos con Él, Él los renueva cada día y da los Siete Dones para el desarrollo de todos los días.
Por tanto, quien ama la vida que recibió de Dios, cuida de ella.
Convertíos, convertíos, cada día el tiempo va pasando y acercándose más la hora de los sufrimientos mayores.
Queridos y amados hijos de Mi Inmaculado Corazón, os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo que os ilumina conduciéndoles para siempre con Su Luz.
Yo soy la Sierva del Señor, María, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo, el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo. Yo soy la Inmaculada Concepción de María, Soy la Mensajera de Dios y en el mensaje de hoy Él os agradece por el momento de oración y os advierte:
Continuación II del mensaje del 19 de febrero de 2018
"Mis hijos, he aquí el tiempo de conversión, venid todos a Mí con vuestros corazones abiertos. Preparad, vosotros estáis cerrando los ojos para no ver que el tiempo está cada día más cerca, para vuestro juicio. Vosotros no queréis saber lo que sucede en el mundo, pero os digo, el mundo cada día peca más aún. Cuando reconoces lo que estáis haciendo con vuestra propia vida, veréis guerras, catástrofes, enfermedades más graves, el hambre y la sed y lo peor, la oscuridad total.
"Mis hijos, he aquí el tiempo de conversión, venid todos a Mí con vuestros corazones abiertos. Preparad, vosotros estáis cerrando los ojos para no ver que el tiempo está cada día más cerca, para vuestro juicio. Vosotros no queréis saber lo que sucede en el mundo, pero os digo, el mundo cada día peca más aún. Cuando reconoces lo que estáis haciendo con vuestra propia vida, veréis guerras, catástrofes, enfermedades más graves, el hambre y la sed y lo peor, la oscuridad total.
Una guerra terrible se está acercando, vosotros habéis de querer apresurar para enderezaros, pero será tarde.
Ya sabéis lo que todos necesitan oír, pero la mayor parte se hace de sorda, y no se prepara.
Pero recordad que sin conversión no hay Salvación, para quien no se convierta. La conversión es renunciar al pecado y acoger Mi voluntad. Yo Soy Dios. Soy el que Soy y Estoy llamando uno por uno, a una preparación con más urgencia."
Queridos hijos, unidos vamos a reflexionar las Palabras de Dios Nuestro Padre Eterno, el Todopoderoso, que una vez más os invita a abrir vuestros corazones a Él, para convertiros.
Mis hijos, el hombre con el corazón duro, cerrado, no crece espiritualmente y así cada día para él es más pesado todavía. El hombre sin amar a Dios no sabe comprender las dificultades que surgen en su día a día. Es necesario tener aceptación a la Voluntad de Dios, hay que despertar a la realidad.
El mundo hoy se está desbordando de ilusión, de
falsedades. La
realidad es Dios, Él no peca, Él sólo ama. El
mundo odia, el mundo peca y perjudica, no sólo el cuerpo, sino que perjudica al
universo y causa catástrofes terribles, siendo la peor de ella la pérdida de la
Salvación.
Por eso el Llamado de Dios a todos es la conversión, quien no se convierta irá al Infierno. Convertíos, convertíos.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a reflexionar sobre la justicia verdadera. El que hace mal al hermano, está ofendiendo mucho más a Dios.
Por eso todos pecan contra Dios. Él sabe todo lo que hacéis. Si practicáis el bien, Lo agradáis y si practicáis el mal Lo estáis ofendiendo. Meditad sobre esto y convertíos.
Nadie puede esconder nada que hace ante Dios, todo es visto por Él. Dios está por encima de todas las cosas. Entonces reconozcáis que todos los pecadores tienen culpas a reparar.
Este es el último tiempo de reparación antes del Juicio Final.
No importa vuestro rechazo a lo que os hablo, vosotros sufriréis si no valoráis, Yo hago la Voluntad de Dios, os revelo todo lo que Él manda, pero creed, cada uno tiene que responder a Dios, no a Mí.
Ahora ha llegado la hora de que todos deberían haber escuchado, pero sólo los que respetan a Dios escuchan, éstos serán felices Eternamente. Nada destruirá la felicidad que tendrán por toda la Eternidad. En cuanto a los que Me despreciaron y Me desprecian todavía, tengo pena, pero Dios sabe lo que hace. Deseo que todos se recuperen y sean felices Eternamente.
Esto es lo que vengo a revelaros hoy para vuestra conversión.
Ahora os pido la Santa Misa, la Santa Eucaristía con fidelidad a Dios.
Rezad, rezad, rezad por los dos Santos Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y los paganos, deseo que ellos se apresuren a convertirse, el tiempo cada día es más corto. Quien no se convierta irá al infierno. A los que rezan por ellos, no debéis desanimarse, Dios os dará la recompensa en el Cielo.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, unidad y oración.
Todos juntos en este momento difícil para vuestro país y para el mundo entero.
Vosotros estáis dando inicio al tiempo de la Santa
Cuaresma. Todo
lo que hacéis de bueno en este tiempo os dará fuerza para soportar vuestros
sufrimientos que están llegando.
Continuación III del mensaje del día 19 de febrero de 2018
Aumentad vuestra fe y confiad en el Amor de Dios por vosotros.
Aumentad vuestra fe y confiad en el Amor de Dios por vosotros.
Estéis atentos a las ofertas que el demonio os hace durante este tiempo de la Santa Cuaresma.
Mientras Jesucristo estaba en el desierto, Él rezaba, haced lo mismo.
Tengáis cuidado de no caer en las trampas del demonio, él usa todo para atraer, la alimentación, los placeres, la venganza y todo el pecado.
El hombre sabio se protege con oraciones y ayunos.
Ayudad a los Santos Papas a buscar las ovejas que están lejos de la Santa Iglesia, la Verdadera, Aquella que Jesucristo fundó y colocó al Santo Padre Pedro para ser la piedra fundamental.
Entonces vamos a rezar más para buscar a los que están fuera de la Iglesia Verdadera.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasileños, preparad, este es un tiempo de mucho sufrimiento para vuestra patria.
Todas las naciones, preparad como es preciso, veréis
muchos sufrimientos por culpa de vuestros pecados.
La deshonestidad está dominando y vosotros estáis sabiendo y aceptándola por eso veréis el resultado. Rezad, rezad.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Gracias por responder al Llamado de Dios.
Esforzaos en acompañar a Jesucristo en el desierto cuando Él vino al mundo.
Aprended con El y venceréis.
Ahora os ofrezco Mi Inmaculado Corazón como Refugio a la hora del gran castigo que se acerca al pecado, un gran castigo se acerca al mundo, cuidad de vuestras almas.
Con todo cariño y amor de Madre os deseo Paz y llevo a Dios vuestras peticiones.
La Paz de Nuestro Señor Jesucristo esté con vosotros ahora y para siempre. Amén. La Paz.
¡Paz! ¡Paz! ¡Paz! ¡Amén! ¡Amén! ¡Amén!
Bendito sea Dios, Bendito sea su Santo Nombre.
Debéis reflexionar sobre el Santo Evangelio de hoy: San
Mateo 25,31-46 - Lectura: Levítico 19,1-2.11-18
Mensajes de Nuestra Señora – María, Llena de Gracia
El Adviento del nuevo mundo - Palabras de Nuestra
Señora
El último tiempo de mensajes para la humanidad
18 de febrero de 2018
1er domingo de la Santa Cuaresma
1er domingo de la Santa Cuaresma
Queridos hijos, hoy, en el día del Señor con mucho amor y
cariño, vengo a bendeciros en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino
Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, convertíos, revivid el sufrimiento de Mi Divino Hijo Jesucristo, el Hijo Unigénito de Dios, Verdadero Dios Verdadero Hombre, que dio Su Vida en la Cruz para salvarlos.
No sigáis en la indiferencia como estáis hasta hoy. Dios Padre, el Creador de todas las cosas, dio a vosotros a Su propio Hijo para que no perdáis la salvación.
Pero la mayor parte no está valorando la vida que tiene y va hacia la infidelidad.
Despertéis Mis hijos, debéis volver vuestros corazones a la realidad.
Los días de ahora son días de recuperación, de batalla contra el mal y vosotros estáis cerrando los ojos para no ver.
Por tanto, Dios está enviando ayuda para cada uno de vosotros y vosotros no estáis valorizando, habéis vivido sólo en la indiferencia y continuáis prefiriendo permanecer en ella para no renunciar al pecado. El mundo entero está idolatrando el pecado y huyendo de la Santidad.
Todos los días la mayor parte de la humanidad está considerando a la Santidad un motivo de crítica y perdiendo más oportunidad de mejorar su manera de vivir.
Mejoréis vuestro comportamiento ante Dios es lo que todos tienen que hacer con urgencia.
Pobres hijos, vuestro sufrimiento cada día está aumentando.
Hoy vosotros estáis una vez más invitados a revivir el sufrimiento de Jesucristo en el desierto. Ved cómo el enemigo se burló de El, ved cómo El sufrió con las renuncias que hizo para salvar, renunció el alimento, las riquezas, ved cómo el demonio Lo atormentó con burlas, para hacerle desistir de vosotros.
Pero Jesucristo soportó todo para librarles de la esclavitud del pecado y Salvarlos.
Vosotros estáis empezando a la Santa Cuaresma, seáis fuertes, esforzaros para renunciar al pecado y convertíos, convertíos con más urgencia, antes que sea tarde.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a reflexionar sobre la batalla final, la hora de preparar para dejar este mundo del pecado y comenzar a vivir en la verdadera Felicidad.
Dios os invita a vivir totalmente entregados en las Manos de El. Renovéis vuestra fe y vuestra esperanza en la Salvación. Son 40 días de reparación, hacedlo con el corazón abierto y confiados en el amor de Dios por vosotros.
Revivid todo lo que pasó con Jesucristo sufriendo por vosotros y procuréis agradecer con el cuidado de vuestra vida, que Él un día muy próximo vendrá a liberarla de todo pecado.
Dios te está llamando, un gran castigo caerá sobre la desobediencia humana, una vez castigó con el Diluvio, Dios dio al mundo otro tiempo y el mundo pisó la oferta de Él pecando más aún, y esta vez el castigo será con el fuego. Pero existe una oportunidad para no ser castigado, es la conversión con urgencia.
Convertíos, convertíos, convertíos antes que sea tarde.
Esto es lo que os revelo hoy, para vuestra conversión.
Rezad, rezad, rezad por los dos Santos Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y pagados, el tiempo se está agotando, un día ellos verán que Dios les dio todas las oportunidades de Salvación. Si ellos desprecian no serán felices, van a sufrir más de lo que pueden pensar.
Continuad rezando por la conversión de ellos, los que aman a los hermanos luchan por ellos hasta que sea posible. Dios os dará la recompensa en el Cielo.
Continuación del
mensaje del 18 de febrero de 2018
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, Él soportó todo por vosotros, para daros la Salvación. Renovéis vuestras esperanzas y tendréis la certeza de la Felicidad Eterna.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, Él soportó todo por vosotros, para daros la Salvación. Renovéis vuestras esperanzas y tendréis la certeza de la Felicidad Eterna.
Ayudad a los Santos Papas a buscar las ovejas que aún están lejos de la Santa Iglesia.
Agradeced a Dios por todo lo que recibís cada día, para no caer en el abismo profundo. Quien caiga allí nunca volverá.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasil, rezad, rezad, rezad, sed fieles a Dios. Creed Mis hijos que Él ha enviado siempre Avisos para que todos se preparen porque algo terrible está para suceder muy pronto en el mundo y también un fuerte ... para Brasil.
Todas las naciones, recordad, tenéis ahora la oportunidad para mejorar vuestra situación. La tierra va a temblar con la guerra que ya empezó, pero vosotros estáis cerrando los ojos para no ver. La mayor parte no tiene el temor a Dios.
Rezad Mis hijos, el mundo nunca se prepara para vencer porque no se humilla ante Dios como hay que humillarse. Ahora es tarde, no fue falta de advertencias.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Debéis reflexionar sobre el Santo Evangelio de hoy:
Marcos 1,12-15
1ª lectura: Génesis 9,8-15 - 2ª lectura: 1Pedro 3,18-22
1ª lectura: Génesis 9,8-15 - 2ª lectura: 1Pedro 3,18-22
